Como cada 14 de febrero, San Valentín es una fecha clásica para salir con la pareja, o en caso de no estar en una relación romántica, con esas personas a quien tanto querés, sean amigos o familiares. En esta edición de Magazine Inmobiliario te recomiendo algunos lugares que podés visitar junto a esos seres tan queridos, y pasar un lindo momento.
En Villa Ballester contamos con una cafetería de especialidad única en su tipo. Color Café (General Paz 2619) normalmente abre sus puertas de miércoles a domingo, pero por esta ocasión abrirá el martes 14 a la tarde, para que vengas a disfrutar de una rica merienda y aproveches unos exquisitos combos junto a tu ser amado.
Es un espacio muy agradable, no sólo por la atención cálida que ofrecen, también por la estética hogareña del local. Y si hablamos de sus productos, todo está preparado con materia prima de altísima calidad. Cada café está hecho con mucho amor por sus baristas, y se acompaña de tortas, alfajores, galletas, tostadas, medialunas, y muchas otras opciones (algunas aptas para veganos).
Si preferís almorzar o cenar, El Encuentro (Lavalle 2501, esquina Boulevard Ballester) es el lugar ideal para comer una rica comida en compañía de esa persona especial. Ofrecen platos para todos los gustos, desde empanadas, milanesas, más de 10 cortes a la parrilla, platos del mar, pastas frescas, ensaladas y también postres. Todo puede ser acompañado por los riquísimos tragos preparados por profesionales en coctelería. Además, el local cuenta con mesas en interior y en su amplia terraza techada.
Para seguir disfrutando de los espacios que tenemos en General San Martín, ¿por qué no disfrutar un espectáculo juntos? En el municipio tenemos teatros como el Complejo Cultural Plaza, donde en ciertos días se puede disfrutar de películas y obras gratuitas. También hay distintos espacios artísticos autogestionados, en los cuales artistas locales presentan obras de teatro, música o danza en vivo, muestras de fotografía, escultura, dibujo y literatura. Recomiendo mucho visitar estos espacios y revisar sus agendas, ya que muchos de ellos ofrecen actividades gratuitas orientadas a diversos públicos.
Tomando en cuenta que estamos en febrero, es decir, pleno verano, y por lo general la gente toma sus vacaciones, otra buena opción es organizar una escapada a las localidades que rodean la Ciudad de Buenos Aires. Por nombrar algunos: Cañuelas, Uribelarrea, La Plata, Montegrande, Lobos, Roque Pérez, Tomas Jofre, San Antonio de Areco, Luján.
Cada lugar tiene su encanto: sitios históricos, museos, pulperías que te permiten viajar al pasado, lagunas, parques, estancias para pasar un día de campo, actividades rurales, cervecerías, y sobre todo, puntos muy bonitos para observar los atardeceres o simplemente relajarse y respirar un aire más puro que el que tenemos en los municipios más cercanos al centro de Buenos Aires.
Por último, me gustaría recomendar otro tipo de escapada, esta vez a los balnearios más cercanos, como pueden ser San Clemente del Tuyú, Las Toninas, Santa Teresita, Mar del Tuyú, Costa del Este, Aguas Verdes, y así hasta llegar a otros como Mar de Ajó y San Bernardo. Si tienen suerte y el tránsito en la ruta no está sobrecargado, pueden llegar en 5 horas o menos.
Una alternativa a esto es visitar la costanera que abarca los municipios de Tigre, San Isidro y Vicente López. Lógicamente uno no puede nadar en el agua, pero sí es posible realizar otras actividades como paseos en catamarán y otras embarcaciones fluviales. Sino, optar por algo más tranquilo como caminar por la costanera o sentarse a disfrutar de la gastronomía local, es un muy buen plan.
Hay que destacar que el amor no es algo exclusivo de la pareja. Esos vínculos tan hermosos que se forman entre amigos, con los hijos, hermanos, padres -y otros familiares- o con las mascotas, también es amor, y es un sentimiento tan fuerte y sincero, que con sólo acordarse de ese ser querido, uno se siente feliz.
Sea cual sea el plan que hayas elegido, y con quién decidas pasar ese día, no hace falta organizar una salida súper sofisticada para pasarla bien.
Agarrarse las manos, abrazarse, hablar de cualquier cosa, o por el contrario estar en silencio juntos, sólo disfrutando el momento. Al pasar el rato con quienes querés, algo tan cotidiano y simple como dar una vuelta a la manzana se convierte en nuevos recuerdos, que cada vez que pasen por tu cabeza, van a sacarte una sonrisita.