¿Cómo decorar tu casa vacacional?
Ya sea en la playa, en el campo o en las montañas, tener tu propio hogar para pasar las vacaciones o por lo menos para aprovechar un fin de semana largo y desconectar de la rutina es una gran inversión, y hoy en día una felicidad y un privilegio enorme. En esta edición te traemos consejos para equipar y decorar tu casa de veraneo que pueden aplicarse a cualquier zona.
El mobiliario: utilidad antes que estética.
Los muebles plegables son los indicados para este tipo de casas: podés llevarlos a cualquier lado porque no ocupan mucho espacio, y a la hora de limpiar el piso es tan simple como apilarlos a un costadito y listo. Muchos están hechos con materiales que son fáciles de mantener, con solo pasarle una franela ya están listos para usar o guardar hasta la próxima visita.
Asimismo son útiles los muebles con rueditas: no rayan el piso, son fáciles de desplazar hacia el interior del hogar en caso de lluvia o viento, y no necesitás ser fuerte a la hora de cambiarlos de sitio.
¡No nos olvidemos de los grandísimos sofá-camas! El mejor aliado ante situaciones como invitados que se sumaron a último momento.
Otros ejemplos de muebles multifunción pueden ser puffs o sillas que sirvan como asiento y a la vez mesita, o sillones que en la parte inferior tengan cajones para guardar mantas, libros, almohadas, etc.
Lo mejor de todo es que podés aprovechar el tiempo de descanso para concretar proyectos de muebles DIY: ecológicos, creativos, y al mismo tiempo una buena forma de poner a prueba tu habilidad de construcción.
Con respecto a los textiles, lo mejor es optar por fibras naturales, ya sea para cubrir un sofá, enfundar una almohada o comprar una alfombra. Se ve mucho más acogedor a la vista y queda super estético en cualquier ambiente. Muchas comunidades trabajan con ese tipo de material, así que también es una manera de ayudar al comercio local.
La pintura.
¿Te aburre el color de las paredes? ¿Querés darle más vida? No se diga más. Te recomiendo los colores brillantes o tonos de blanco. Así vas a darle más luminosidad a los ambientes, y a la hora de cambiar muebles, será sencillo elegir unos que combinen con el color de las paredes.
Por otro lado, hay que generar armonía entre el paisaje y el interior. Por ejemplo, si tu casa está ubicada en la costa, pintá una pared de turquesa o celeste. Si está ubicada en la montaña, optá por un tono verde oliva o tierra.
Otra idea puede ser renovar la pintura de los exteriores, ya sea para que combine con la estética del vecindario o para hacer que tu casa se destaque entre las otras por su color.
La iluminación.
No podemos hablar de pintura sin relacionarla con la iluminación. Imaginate que pintás toda la habitación de blanco puro. Sí, logrará un efecto super luminoso y combina a la perfección con zonas de playa, pero puede resultar un poco vacío a la vista. Allí es donde entran las lámparas, ya sea de techo o de pie, para darle un tono más anaranjado y cálido a las paredes.
En esta sección, otra vez, vamos a incluir a los proyectos DIY. Por ejemplo, podés armar una bonita lámpara con una botella y rellenarla con piedras o arena. O añadir velas a recipientes de vidrio que ya no utilices.
¿Y qué hacemos con el jardín? Las flores son muy bonitas y dan alegría al hogar, pero alguien tiene que mantenerlas. En este caso optá por enredaderas, cactus o plantas que se ajusten a la zona y las condiciones climáticas en la cual está ubicada tu casa y que no requieran de riego constante.
Decorar tu casa puede ser muy accesible si aprovechás los recursos que tenés disponibles. Es más, seguramente en tus vacaciones vas a encontrar un montón de ferias donde comprar objetos decorativos, souvenirs y cuadros de artistas locales. La próxima vez que viajes, dale un vistazo a las ferias, ¡Algo vas a encontrar!