Playrooms para niños
Llegó el invierno y con él las actividades de los niños al aire libre se acortan considerablemente. Por eso, es un buen momento para preparar un espacio interior en nuestro hogar en el cual ellos puedan disfrutar, jugar y distraerse. Los Playrooms son una excelente opción, porque están diseñados para que los más pequeños jueguen y se diviertan de forma segura. Pero además pueden ser utilizados como sala de lectura o estudio, al menos en ciertos horarios. En esta nota, te vamos a dar algunos consejos para que tengas en cuenta al momento de la construcción de tu propio playroom.
Establecer el área a utilizar
Frente a una habitación, un entrepiso o un altillo que se va a convertir en el área de juegos de tu casa, el primer paso es definir qué actividades se van a desarrollar en él para que puedan llevarse adelante cómodamente. Esto es pensarlo para chicos de distintas edades con sus juegos y juguetes o para grandes con sus mesas de pool, ping pong o un metegol. O incluso poder hacer un área mixta, un lugar donde la familia pueda sentirse cómoda y rodeada de elementos que le transmitan calma, calidez y buena vibra.
Es importante tener en cuenta que no se requiere un gran espacio para hacer el área de juegos de tus hijos. Ya que podemos designar algún sector de la habitación y que perfectamente ellos jueguen, se diviertan e imaginen de la mejor manera posible.
La decoración
Una vez que ya tengamos decidido el área que vamos a utilizar, debemos ocuparnos de la decoración del playroom. Es importante elegir una temática y una paleta de color en específico. Lo recomendable es no enfocarse en un solo personaje al momento de construir todo el área de juegos, porque es muy probable que los niños se aburran de él rápidamente. Lo mejor es seleccionar alguna temática, como pueden ser dinosaurios, los planetas, cuentos de hadas, bosques, entre otros. Y que a partir de esa temática que hayamos elegido encontrar qué paleta de color encaje perfectamente para que todo esté en armonía.
Otro aspecto muy importante es la iluminación. Es recomendable utilizar diferentes tipos de lámparas, para generar otros espacios dentro del mismo ambiente. Lo ideal es alternar luces puntuales con otras que no lo son para crear calidez y que esta influya considerablemente en el estado de ánimo de las personas. El playroom debe ser un espacio muy luminoso, que invite a quedarse para pasar el tiempo libre y disfrutar del ocio, descanso y entretenimiento.
Seguridad
Además de buscar que el playroom sea agradable y divertido, tenemos que ocuparnos de que sea extremadamente seguro. Para ello, por ejemplo, no debemos poner objetos que permitan a los niños escalar junto a las ventanas, debemos cubrir y revisar con detalle las conexiones e instalaciones eléctricas y del gas, evitar muebles con puntas filosas, elegir juguetes que no se rompan o se desarmen en piezas pequeñas, disponer de alfombras que sirvan para amortiguar las caídas, etc. Tenemos que identificar todas las áreas peligrosas de nuestro playroom y asegurarlas. El objetivo de un área de juegos es que los niños puedan tener un espacio donde jugar y que nosotros podamos sentirnos tranquilos mientras lo hacen.
Una vez puestos en práctica todos estos consejos ya estamos listos para comenzar a crear nuestro propio playroom. Podemos encontrar muchísimos ejemplos por internet, pero no hace falta copiarnos exactamente de lo que veamos, sino que estos nos sirvan como una guía para crear el mejor área de juegos para toda nuestra familia. En este mes de Agosto, en el cual se celebra, el tercer domingo, el dia de ellos, de nuestros niños, tengamos en cuenta todos estos consejos y ¡manos a la obra!