Siempre es buen momento para renovar los espacios del hogar, ¿por qué no aprovechar para darle una nueva cara a la fachada de tu casa? En esta nota te traemos algunas ideas originales para que tu casa destaque mucho más.
Por lo general, las fachadas se componen de, como mucho, 3 tonos: donde uno se ubica como el principal y los otros 2 son complementos para destacar zonas como los marcos de las ventanas, puertas, rejas, techos, columnas o relieves. Estos colores suelen armonizarse con el ambiente. Sin embargo, si querés ir más allá de lo “normal”, ¿qué te detiene a convertir a tu casa en una explosión de color? Salí de los tonos apagados y animate a colores poco comunes.
Si optás por algo más tranquilo, las fachadas monocromáticas son una gran opción: paredes blancas y marcos negros (o al revés), o combinaciones de blanco y tonos tierra. También podés utilizar un color base que no destaque mucho, y combinarlo con detalles en uno o dos tonos fluo.
No nos olvidemos de los tonos pastel. Suaves, agradables, le van a dar un toque romántico a tu hogar. Se los suele combinar con detalles en blanco, aunque también con su complementario cromático. Por ejemplo, una fachada cuyo color principal sea el celeste, y como secundario, anaranjado. Otra idea: el mismo color, pero en un tono más oscuro, que genere dualidad.
Las herramientas de trabajo son importantísimas: no es lo mismo utilizar rodillos y brochas para superficies lisas, que para superficies rugosas ¡Y sobre todo la pintura! Las paredes pueden estar hechas con distintos materiales (como hormigón, piedra o madera), por lo tanto la pintura cambia en cada caso. No solo eso: también tenés que pensar en las condiciones climatológicas de la zona: ¿llueve mucho? La humedad puede convertirse en un problema entonces.
Por último, antes de planear, hay que arreglar cualquier desperfecto que pueda tener la superficie. Una pared lisa y nivelada, sin grietas, abolladuras, pintura descascarada o vieja, manchas, etcétera, está lista para pintar.
Una vez que esté todo preparado, tenés que organizar el día. Es recomendable pintar cuando el sol no pegue directamente sobre la pared, este horario va a cambiar dependiendo la orientación de tu hogar. Evitá los días ventosos o para los cuales se pronostique lluvia, ya que estas condiciones provocan que se estropee la pintura.
La pintura de mala calidad o en mal estado trae como consecuencia las grietas, filtraciones y desprendimientos de la misma ¿Sabés dónde podés conseguir pintura de increíble calidad? Obviamente, en Pinturerías San Andrés. Excelentes productos, y un gran asesoramiento para que consigas la pintura ideal para tu hogar.